Alonso: “El ritmo de carrera no era malo, no íbamos tan mal”
El regreso del piloto asturiano tan solo ha durado 22 vueltas, dejando con un mal sabor de boca a todos los aficionados. Alonso recibió órdenes de entrar a boxes por un problema en el ERS, evitando una rotura en la unidad de potencia.
A pesar del abandono hay aspectos positivos como por ejemplo el poder luchar contra otros monoplazas a diferencia del Gran Premio de Australia:
“El ritmo de carrera no era malo. No íbamos tan mal. Teníamos un Toro Rosso y un Red Bull justo por delante y era un poco sorprendente rodar con los demás coches“, ha comentado al bajarse del MP4-30.
En sus declaraciones después de la carrera ha vuelto a remarcar que para McLaren las carreras son como test, ya que en los test invernales no pudieron testear muchas cosas, como por ejemplo, los pit stop:
“Como decíamos ayer, necesitamos experiencia y no sé qué ha pasado en el coche. El problema se debe a algo con la presión del aceite o el agua. Pero es normal. Si hubiéramos tenido un invierno normal, no estaríamos así. No noté nada y en la última vuelta me dijeron que tenía que bajar el ritmo para salvar el motor. Un buen test para que lo que se ha roto hoy no se vuelva a romper en la siguiente carrera“, ha relatado el piloto de McLaren Honda.
Hay que reconocer que Malasia se caracteriza por ser uno de los circuitos más duros físicamente por sus temperaturas extremas y que Alonso llevaba un mes en inactividad. No obstante, considera que hubiera acabado el Gran Premio sin problemas pero con mucho cansancio:
“Estoy un poco cansado, pero no era un problema acabar la carrera. Necesito entrenar estas semanas para llegar a China a tope y seguir aprendiendo“, concluyó el bicampeón.