Análisis Toro Rosso 2016: de más a menos en una temporada “sin potencia”
Temporada complicada para Toro Rosso, que ha tenido que afrontar la temporada con el motor Ferrari de 2015. Tras 21 carreras, el equipo italiano se ha hecho una séptima posición en la clasificación que sabe a poco, ya que se esperaba a Toro Rosso algo más competitivo este temporada, sobre todo en las primeras carreras.
La nota positiva de esta temporada es que hemos visto a un Carlos Sainz muy guerrero y demostrando por qué merece estar con Red Bull. El madrileño consiguió puntos cuando más lo necesitaba el equipo y fue muy constante durante toda la temporada.
Lo cierto es que la temporada comenzó muy bien para Toro Rosso, con Max Verstappen y Carlos Sainz compitiendo y colándose entre los diez primeros. Sin embargo, con la subida de Max Verstappen a Red Bull y la llegada de un desmotivado Daniil Kvyat, parecía que el buen arranque de Toro Rosso se iba a frenar.
Sin su estrella fuera del equipo y con el piloto ruso desmotivado, a Toro Rosso se le pintaba una temporada poco esperanzadora. Además, había que sumarle que contaban con un motor de la temporada pasada lo que les dificultaba aún más las cosas para la segunda mitad de temporada.
Y efectivamente eso fue lo que pasó. Pasaron de estar peleando con los Williams y Force India a luchar con los McLaren y Haas por las últimas posiciones de puntos. El atraso del motor Ferrari se compensaba con la gran aerodinámica del STR11 y gracias a esto Carlos Sainz pudo arrascar algunos puntos valiosos en los circuitos ratoneros y con rectas cortas que tan bien se adaptaban al monoplaza italiano, aunque no le fueron suficientes al madrileño para alcanzar el décimo puesto en la clasificación del mundial.
Con Kvyat descentrado, Carlos Sainz se echó el equipo a las espaldas a mitad de temporada y durante varias carreras logró puntos claves que han sido fundamentales tanto para el madrileño como para el equipo. La constancia, aunque también los problemas mecánicos de su monoplaza y la mala suerte fueron la tónica del madrileño durante toda la temporada.
Respecto al análisis de los pilotos, hasta que Verstappen se mantuvo en el equipo, la lucha entre el neerlandés y Carlos Sainz fue muy pareja siendo un 2-2 en las primeras cuatro carreras. Sin embargo, cuando Verstappen subió a Red Bull y Kvyat bajó a Toro Rosso, Sainz se comió al ruso, endosándole un 12-3 a final de temporada.
Por su parte Kvyat comenzó sumando un punto en su regreso a Toro Rosso en el Gran Premio de España, pero ese resultado fue un espejismo para el ruso pues no volvería a aumentar su casillero hasta Gran Bretaña. Al menos el campeón de la GP3 en 2013 tuvo la oportunidad de resarcirse y en Singapur y sumar otros dos puntos y, a mi gusto, su mejor carrera de la temporada.
Durante buena parte la misma Kvyat estuvo entre los diez primeros e incluso se defendió de los ataques de un desesperado Max Verstappen que era incapaz de superar al ruso. A pesar de que la temporada no ha acabado como le hubiera gustado al piloto de Toro Rosso, lo cierto es que ha mejorado desde España hasta Abu Dabi.
Para 2017 Toro Rosso contará con Daniil Kvyat y Carlos Sainz. Si el ruso vuelve a recuperar la confianza en sí mismo puede dar mucho espectáculo. También deberá de mostrar su valía Carlos Sainz y llegar en una ocasión o más los cinco primeros será un éxito, aunque será complicado. Será un año clave para el futuro de los dos pilotos en la Fórmula 1 en un año en el que la normativa cambiará radicalmente.
Como novedad, para 2017 Toro Rosso contará con motor Renault y la marca del rombo lo podrá ir mejorando durante la temporada, por lo que ya no tendrán que contar con un motor pasado. Si el coche es bueno aerodinamicamente, seguro que los resultados llegarán y podremos ver a Toro Rosso y Carlos Sainz peleando por los puntos carrera tras carrera.