Análisis Red Bull RB16B: ¿el arma definitiva para derrotar a Mercedes?
Red Bull Racing es el cuarto equipo de la parrilla en presentar el monoplaza con el que competirá en el Campeonato del Mundo de Fórmula 1 en 2021. Bajo la denominación de RB16B, la apuesta de la estructura con base en Milton Keynes es prácticamente idéntica a la de su antecesor, consecuencia de la actual congelación de desarrollo.
Y es que, como año de transición hacia el revolucionario cambio de normativa en 2022, el desarrollo de los monoplazas se ha visto estrictamente limitado, por lo que las modificaciones respecto a los coches de la pasada campaña son mínimas, así como sus denominaciones. Por otra parte, y como apunte de la firma de la bebida energética, que ya ha rodado con su nuevo arma durante una jornada de entrenamientos privados en el Circuito de Silverstone, cabe destacar el cambio de alineación en favor de Sergio “Checo” Pérez.
Dando paso al análisis de este monoplaza en su parte delantera, queda de manifiesto la apuesta de Red Bull Racing por un morro estrecho, ya utilizado por la formación desde el inicio de la pasada campaña. Sin embargo, sí se aprecian sutiles modificaciones en las entradas de aire del mismo, manteniendo un estilo innovador pero con una forma más redondeada en su conducto inferior y con menor superficie de unión al morro en su conducto superior.
Visible también, en el frontal, el ligero desplazamiento hacia atrás del apéndice aerodinámico conocido como turning vane, saliente de los laterales del morro hacia la zona de los bargeboards, así como el s-duck escoltado por dos apéndices y un leve incremento de la superficie y forma de los conductos de frenos delanteros, situados, evidentemente, en un tren delantero unido al chasis mediante el sistema de suspensiones push rod, ambos elementos sin alteraciones respecto a 2020.
Retrocediendo a la zona central del RB16B, posiblemente la que menos cambios experimenta en comparación con el diseño de la pasada temporada, se encuentra un cockpit prácticamente calcado a su predecesor, en lo que se refiere al modelo de halo, retrovisores y conducto de aire hacia el propulsor, además de las entradas de refrigeración del pontón, localizándose, pues, las principales modificaciones en la parte de los complejos bargeboards.
Bargeboards que, pese a seguir un concepto continuista de los mismos, han sido uno de los puntos de desarrollo utilizados por Red Bull Racing de cara al título de 2021, pues salen a la vista diferentes formas de los apéndices aerodinámicos más próximos al chasis, concretamente en los situados en la parte posterior a un ya habitual boomerang que permanece en iguales circunstancias que en la versión anterior.
Respecto al diseño inaugural de la pasada campaña, que no al monoplaza competidor durante la misma y con el cual Max Verstappen se hizo con el triunfo del Gran Premio de Abu Dhabi, es importante mencionar un cambio en la forma de los redireccionadores de flujo, ahora ondulados, situados en los endplates del alerón trasero, cuya sujeción es, nuevamente, a través de un sólo pilar tras un intento, parece ser que fallido, de un concepto doble.
Finalmente, para poner punto y final al análisis de este evolucionado monoplaza, toca poner atención en su fondo plano, quedando eliminados, por normativa, la mayoría de “cortes” del mismo, aunque permaneciendo un pequeño conjunto de apéndices en la parte más próxima a un tren trasero con modificaciones en el punto de apoyo de las suspensiones pull-rod, destacando también una leve compactación del pontón, propiciando una mayor caída hacia el suelo de este RB16B.