Análisis de la pretemporada 2023: Alfa Romeo es un equipo a tener en cuenta
Un paso adelante. Así calificaba Valtteri Bottas el papel de su equipo al término de la pretemporada. Y lo cierto es que las primeras sensaciones del último Alfa Romeo-Sauber denotan un claro progreso respecto a la edición anterior. A pesar de las incógnitas de estos tests, la alianza italo-suiza evoluciona y podría sorprender este mismo año.
Como bien recordamos en este medio, presente en la primera mitad de la pretemporada 2022, las expectativas sobre Alfa Romeo rápidamente se convirtieron en la gran decepción de los tests de Barcelona. Camuflado bajo una decoración cebreada única, la estructura de Hinwil llegó al Circuit con los deberes a medio hacer, un sinfín de problemas mecánicos y una falta de kilometraje que, semanas más tarde en Sakhir, acabaron salvando como buenamente pudieron.
El panorama es muy distinto un año después: el que será el último monoplaza de la asociación Alfa Romeo-Sauber -y quién sabe si el último de la icónica marca italiana en Fórmula 1- parece haber nacido con un pan debajo del alerón. Ahora junto a otro patrocinador principal, tras la marcha de Orlen como socio, el fabricante suizo mira al futuro con optimismo y no solamente por su prometedor comienzo. En el horizonte, el vínculo con Audi y la capitanía de Andreas Seidl.
Volviendo al feeling de Valtteri Bottas, en consonancia con otros miembros de la escudería, hay razones para ser positivos. Si bien es cierto que sufrieron un par de problemas mecánicos de relevancia en Bahréin, nada se asemejan éstos a los mencionados dolores de cabeza que padecieron tiempo atrás. Además, se situaron como el tercer equipo con más mejora de tiempo respecto a la precampaña pasada y superaron las cuatrocientas vueltas.
Sin poner demasiado énfasis en el cronómetro y el balance general de la pretemporada en términos de competitividad, aunque mencionando el mejor tiempo de Guanyu Zhou el segundo día y tercero global de su compañero de equipo, se podría considerar a Alfa Romeo como una de las estructuras a tener en cuenta, al menos, en las primeras carreras del campeonato. En constantes pruebas de elementos y programas, parecen estar preparados para el semáforo verde.
El Gran Premio de Bahréin se encargará de transformar las sensaciones en realidades aunque, por ahora, el trabajo parece bien hecho. A falta de pulir la fiabilidad, el C43 se postula como un coche a tener en cuenta y, sobre todo, al acecho. Con los datos que tenemos a día de hoy, situarlo en el liderato de la zona media sería una predicción aventurada. Sin embargo, los aparentes problemas de Alpine y McLaren podrían convertirlos, fácilmente, en el quinto o sexto equipo de la parrilla.