Maravillas de la Ingeniería: Tyrrell 006, el tricampeonato de Jackie Stewart
La temporada de Fórmula 1 de 1973 prometía y mucho después de que el año anterior Lotus dominase la categoría con Emerson Fittipaldi como piloto campeón. El brasileño lograba ser catapultado entre los grandes de la historia por llevarse el campeonato de 1972, superando a un Dave Walker que con el mismo monoplaza ganador no consiguió anotar ni un solo punto. Ronnie Peterson, que contaba con la ciega confianza de Colin Chapman, fue su sustituto para 1973, pero la todopoderosa Lotus de Fittipaldi se toparía con Jackie Stewart.
Tyrrell ganó los mundiales de constructores y pilotos en 1971 con el piloto británico al volante en un alarde de esfuerzo y trabajo constante durante toda la temporada, pero desde aquel año necesitaron un espacio de tiempo para volver a lo más alto. El Tyrrell 006 fue el proyecto de la escudería para regresar a lo más alto de la clasificación, y aunque el comienzo de la temporada de 1973 parecía decantar la balanza en favor de Lotus con victorias de Fittipaldi en tres de las cuatro primeras carreras, lo cierto es que el brasileño no volvió a ganar el resto del año. Los problemas internos entre Emerson y Peterson conllevaron muchas distracciones dentro de la escudería, mientras que en Tyrrell la pareja que formaban Stewart y François Cevert funcionaba a la perfección.
Con las victorias de Sudáfrica, Bélgica, Mónaco, Holanda y Alemania, Stewart se aseguró suficiente ventaja en el campeonato como para hacerse tricampeón en Italia, a falta de dos citas aún por disputarse antes de acabar la temporada. Con una remontada de las que marcan época Jackie terminó cuarto en Monza y se hizo con su tercer y último campeonato de Fórmula 1, siendo además en aquel entonces el piloto con más victorias de la historia, con un total de 27 que le situaban por delante de Jim Clark y Juan Manuel Fangio.
Centrándonos en la máquina que utilizó Stewart en 1973, el Tyrrell 006, debemos destacar su gran fiabilidad y constancia frente al Lotus 72, algo que jugó un papel fundamental en el campeonato. La cubierta motor se caracterizaba por una toma de aire con una apertura triangular que refrigeraba muy bien todos los componentes, contando además con unos radiadores de agua que se movieron ligeramente en comparación a 1971 para aumentar su eficiencia. El motor V8 Ford Cosworth de 2.995 cc producía una potencia de 450 bhp a 10.400 rpm, unas cifras con las que tenía que lidiar una caja de cambios secuencial Hewland FG400 de 5 velocidades (6 sumando la marcha atrás). El peso en seco del monoplaza era de 575 Kg, contando con un tanque de gasolina de 190 litros de capacidad.
Como curiosidad es destacable mencionar que al final de la temporada Tyrrell trató de copiar el morro de su enemigo directo, el Lotus 72. Stewart y Cevert no optaron por la nueva modificación y se mantuvieron en la vieja especificación mientras que Chris Amon, tercer piloto de Tyrrell, sí que corrió con el morro en forma de cuña durante el Gran Premio de Canadá, donde pudo participar como tercer piloto del equipo.