Sebastian Vettel y la hipocresía de competir en la Fórmula 1
Sebastian Vettel ha mostrado en numerosas ocasiones su apoyo a la lucha contra el cambio climático y su apoyo al medioambiente. El último gesto que realizó fue en el pasado Gran Premio de Miami mostrando una camiseta durante la jornada del viernes y luciendo un casco especial en el que informaba que Miami podría ser una carrera bajo el agua en unos años debido al calentamiento global, el deshielo que se experimenta por ese calentamiento y por ende, la subida del nivel del mar.
Sin embargo, el cuatro veces campeón del mundo se une a la lucha contra el cambio climático a la vez que pilota monoplazas que tienen un gran consumo de combustibles, además de coger una gran cantidad de aviones todos los años para ir de un lado para otro del mundo. Esto es algo que el propio Sebastian Vettel admite que es una gran hipocresía, ya que su nivel de vida no se adapta actualmente con su pensamiento sobre el medioambiente.
“Un Fórmula 1 es una máquina que devora gasolina. Me hago preguntas todos los días. No soy un santo, estoy muy preocupado por el futuro y estos temas, la energía, la dependencia energética y hacia dónde vamos en el futuro. Necesitamos dejar de ser dependientes y podemos porque hay soluciones para ello. Es cierto, es algo que me estoy preguntando. Hay ciertas cosas que están bajo mi control y otras no. Es mi pasión pilotar, lo amo, y cada vez que me subo al coche, lo amo. Cuando salgo de él, por supuesto, pienso: ¿es algo que deberíamos hacer, viajar por el mundo, desperdiciar recursos?”, comenta Sebastian Vettel.