¿Qué fue del Valencia Street Circuit?
Como cada martes, volvemos con una nueva entrega de “¿Qué fue de…?”, sección en la que recopilamos la historia de pilotos, escuderías y circuitos, que han pertenecido al mundo de la Fórmula 1, y os mostramos que ha sido de ellos. Hoy, y tras recuperar la semana pasada a Giancarlo Fisichella, nos centramos en un circuito, que no es otro que el Valencia Street Circuit, situado como su nombre indica, en las calles de Valencia.
La Comunidad Valenciana cuenta con un circuito permanente, situado en Cheste, y conocido como el Circuito Ricardo Tormo, que acogió durante un tiempo los test de pretemporada de Fórmula 1, además del mundial de motociclismo, el cuál se sigue celebrando allí. A pesar de contar ya con un circuito, desde el Ayuntamiento de Valencia se decidió poner en marcha un proyecto para traer a las calles de la ciudad la Fórmula 1.
De esta manera nace el Valencia Street Circuit, un trazado que recorre las calles de la ciudad, pasando por las carreteras que bordean el puerto valenciano, sede de la Copa América de vela, además de por un puente colgante de unos 140 metros de largo. Por si esto no era suficiente, se le encomendó a Herman Tilke la labor de incluir algunas zonas más al circuito diseñadas por él, además de encargarse de las infraestructuras con las que contaría el circuito. En definitiva, un trazado de 5’419 Km, donde se alcanzaban unas velocidades máximas cercanas a los 323 Km/h.
El acuerdo para traer una carrera de Fórmula 1 a Valencia se firmó el día 1 de Julio de 2007, entre Bernie Ecclestone y la empresa Valmor Sport, gestionada por Jorge Martínez Aspar -ex-piloto de motociclismo- y Fernando Roig -presidente del Villareal C.F.-. Tras recibir el visto bueno del Ayuntamiento valenciano, se puso en marcha la preparación del Gran Premio de Europa, que se celebraría el 24 de Agosto de 2008.
Aunque el primer Gran Premio de Fórmula 1 estaba marcado para esa fecha, el trazado hizo su debut a finales del mes de julio de ese mismo año, acogiendo una ronda de la F3 española y otra de la International GT Open, antes de hacer su debut definitivo el fin de semana del 22 al 24 de Agosto, fecha en la que los monoplazas de Fórmula 1 corrieron por primera vez en las calles valencianas. La carrera inaugural se la adjudicó Felipe Massa, al que acompañaron en el podio Lewis Hamilton y Robert Kubica.
De cara a 2009, el Valencia Street Circuit vuelve a ser la sede del Gran Premio de Europa. En esta edición se produce el debut de Romain Grosejan como piloto de Fórmula 1, mientras que Luca Badoer vuelve a competir en la categoría tras disputar su última carrera en 1999. Esta vez, el ganador de la carrera fue Rubens Barrichello, que superó a Lewis Hamilton y Kimi Räikkönen en su lucha por la victoria. Además, este mismo año, Timo Glock establece el récord del circuito, marcando un 1:38.683.
En 2010 y 2011 Sebastian Vettel se lleva el gato al agua en el circuito valenciano. El trazado urbano, aunque no era del tipo de Mónaco, ofrecía también dificultades para adelantar, lo que hacía que esta carrera no fuera la más espectacular del mundial. Cabe destacar que en la edición de 2011, fue la primera vez que un piloto local subía al podio del Valencia Street Circuit, lo haría Fernando Alonso al conseguir un segundo puesto en dicha carrera.
Ya en 2012, Valencia vive una de las mejores carreras vistas por el automovilismo español, cuando Fernando Alonso logra la victoria tras partir en 11ª posición en parrilla. Finalmente, y tras varios rumores que hablaban de una alternancia entre el Circuito de Barcelona-Cataluña y el Valencia Street Circuit, el trazado valenciano se cae del calendario al romper el contrato que les unía con la Fórmula 1 hasta el año 2014, por lo que la de 2012 fue la última carrera que acogió este circuito. Desde la dirección del circuito se consiguió llegar a un acuerdo con Bernie Ecclestone para evitar pagar los cerca de 33 millones de euros que suponían la cancelación del contrato.
Esta decisión fue tomada tras la celebración de cinco Grandes Premios, en los que se hacía una inversión anual que rondaba los 40 millones de euros en concepto de organización, y que apenas reportaba beneficios debido a la poca publicidad que este atraía. Tras su cancelación, el Valencia Street Circuit cayó en un estado completo de abandono, quedándose como lugar de concentración para carreras ilegales, o incluso siendo objeto de robo, llegando a producirse uno valorado en 5.460€, en concepto de materiales que se utilizaron para vallar el circuito cuando éste albergaba el Gran Premio de Europa de Fórmula 1.
A día de hoy, el Valencia Street Circuit sigue abandonado, y aunque en Abril del año pasado sonaron campanas de rehabilitación, de la mano de la misma empresa que puso en funcionamiento el Marina Bay de Singapur, todo quedó en nada, dejando el Valencia Street Circuit como un trazado fantasma y plagado de deudas, en el que posiblemente nunca más vuelva a rodar un monoplaza de Fórmula 1.