¿Qué fue de Jaguar Racing?
El ritmo no para en la Fórmula 1 y esta misma semana el “Gran Circo” afronta una nueva carrera, esta vez en el mítico trazado de Silverstone. Para esta semana, en la sección “¿Qué fue de…?” recuperamos la historia de un equipo británico, que además está estrechamente relacionada con el trazado inglés.
La marca fabricante de automóviles entró en la Fórmula 1 para la temporada 2000, de la mano de Ford. El equipo Stewart decidió abandonar la competición a finales de 1999, momento en el que Ford decidió comprar el equipo y correr bajo la denominación de Jaguar, de modo que la marca de automóviles de lujo del grupo tuviera más publicidad, aunque la implicación tecnológica corría por cuenta de los americanos.
De este modo, Jaguar inicia su andadura en la Fórmula 1 en el año 2000, con Eddie Irvine y Johnny Herbert como pilotos titulares del equipo. Esta primera temporada fue complicada para el equipo inglés, que tan solo consiguió cuatro puntos en toda la temporada y una novena posición en la clasificación final del mundial. Este fracaso llevó al jefe del equipo, Wolfgang Reitzle, a dejar la dirección de cara a la temporada 2001.
En 2001 las esperanzas eran mayores, pero los resultados fueron iguales o incluso peores. Bobby Rahal entró en la dirección del equipo, aunque a mitad de temporada fue sustituido por el tricampeón del mundo, Niki Lauda que intentó fichar sin éxito a Adrian Newey, que por aquel entonces trabajaba con McLaren-Mercedes. La alineación de pilotos también sufrió cambios a mitad de temporada, ya que desde un principio Jaguar contó de nuevo con Irvine y con Luciano Burti, que sustituyó al británico en una carrera en la temporada 2000 y que esta temporada tenía asiento titular. Tras cuatro carreras, Pedro de la Rosa ocupaba el asiento del brasileño hasta final de temporada, además, Irvine lograba un podio en el Gran Premio de Mónaco, siendo el primero de la historia de Jaguar.
Para 2002, la mayoría del elenco de Jaguar se mantenía, con Irvine y De la Rosa como pilotos y Niki Lauda como jefe de equipo. Los resultados fueron algo mejores al inicio, con un cuarto puesto en Australia, aunque pronto empezaron a decaer. Además, Ford comenzaba a acusar problemas económicos debido a los altos costes de mantener un equipo de Fórmula 1, lo que ponía las cosas aún más complicadas. De nuevo Irvine consiguió despuntar al final de la temporada, con un nuevo podio en el Gran Premio de Italia.
Finalmente, los problemas económicos causaron los primeros estragos en Jaguar, que decidió despedir a 70 personas en una reducción de plantilla que afectó también a Niki Lauda. Desde Ford se dieron dos años más de margen para que la escudería empezará a dar beneficios, de no ser así, el proyecto no seguiría adelante.
Y con este panorama el equipo Jaguar afronta la temporada 2003, esta vez con John Hogan al frente, y con una renovación total de su alineación de pilotos. Esta temporada Mark Webber y Antonio Pizzonia serían los encargados de pilotar el monoplaza verde, aunque el brasileño fue sustituido por Justin Wilson para las últimas cinco carreras del año. El año 2003 fue mejor para el equipo en términos económicos, gracias a la gestión de Hogan, que consiguió un uso más eficiente de los recursos y una reducción del gasto.
De este modo, Jaguar llegó a la temporada 2004 de Fórmula 1, con el futuro más en el aire que nunca. Los resultados se estabilizaron, pero los puntos eran prácticamente imposible, por lo que desde el grupo Ford decidieron reducir al mínimo la inversión en el equipo, a la vez que éste era puesto en venta. Esta vez era Mark Webber y Christian Klien la pareja de pilotos de Jaguar, que a finales de la temporada 2004, finalizaba su andadura en la Fórmula 1. La empresa de bebidas energéticas, Red Bull, se aventuraba en un proyecto ambicioso, y se hacía con la estructura de Jaguar para debutar en la temporada 2005. El resto de la historia ya la conocen, Red Bull debutó en 2005, y seis temporadas después, la antigua escudería Jaguar estaba levantando su primer título del mundo tanto de pilotos como de constructores.
En cuanto a la empresa Jaguar, a partir de la próxima temporada, podremos ver sus monoplazas rodar por las calles de Berlín o Londres, ya que han comprado la estructura del equipo Trulli para correr en la temporada 2016-2017 de Fórmula E, la novedosa categoría de monoplazas eléctricos que está en pleno auge.